Últimamente, he estado reflexionando sobre cuánto necesitamos conectar, no solo con nuestros seres queridos, sino con el mundo entero. Es fácil sentirse aislado, atrapado en nuestras propias dificultades, pero en el fondo, todos estamos conectados.
El Amor en todas sus formas: Más Que Solo Romance
Siempre he creído que el amor es una de las fuerzas más poderosas del mundo. Y no me refiero solo al amor romántico, sino al amor que nos rodea de tantas maneras. El amor que sientes por tu familia, amigos, lugares, animales, experiencias, pasiones e intereses, por ejemplo. Cualquier cosa que te conmueva y te haga sentir en tu corazón.
Hace unos meses, reflexionaba sobre cómo explicar el concepto de creer en algo no visible a alguien que desea expandir su espiritualidad o que no cree en nada. Entonces, me vino una idea inspiradora. Podría explicarlo diciendo algo que todos sabemos: el amor no es algo que se pueda ver, comprobar ni sostener físicamente en tus manos.
Al igual que las prácticas esotéricas o las creencias espirituales, el amor es algo que se siente, se expresa, se percibe y se comparte. Es más bien una sensación, una presencia que se manifiesta a través de las palabras, las emociones, el tacto, los actos de bondad y la conexión.
Así es como explicaría lo invisible a aquellos que quieren expandir sus creencias más allá de lo que es físicamente visible.
El amor es eso, existe, puedes sentirlo, pero tu percepción de él depende de tus experiencias, creencias y circunstancias.
Cómo nuestra percepción del amor está determinada por la experiencia
Por ejemplo, alguien que asocia el amor únicamente con las relaciones románticas, sobre todo si ha sufrido heridas profundas y aún no ha sanado, podría ver a una pareja feliz expresando afecto y sentir dolor o resentimiento. Esto podría recordarle su propio sufrimiento. Por otro lado, alguien que ha sanado heridas del pasado o no tiene asociaciones negativas con el amor podría ver a la misma pareja y sentir alegría, inspiración o calidez.
¿Qué significa realmente el amor para ti?
Todos tenemos diferentes lenguajes de amor, por eso, en las relaciones románticas, es fundamental reconocer y comprender cómo expresa el amor nuestra pareja. Cada persona tiene su propia forma de demostrar afecto, ya sea con gestos materiales, contacto físico, palabras, tiempo de calidad, actos de servicio u otras formas de expresión.
En esencia, el amor tiene la misma esencia, pero su significado y expresión varían de persona a persona. A veces, la forma en que alguien expresa amor puede no ser inmediatamente visible, o incluso reconocible, porque todos damos y recibimos amor de forma diferente. Comprender esto puede ayudarnos a construir conexiones más profundas y a apreciar el amor en todas sus formas.
Entonces, ¿qué significa realmente el amor para ti? ¿Lo sientes? ¿Lo tocas? ¿Lo ves? ¿O es algo en lo que creemos sin percibirlo plenamente en forma física?
El amor como fundamento de las enseñanzas espirituales y religiosas
En muchas enseñanzas espirituales y religiosas, el amor se considera la base de todo. Si bien no soy religiosa, creo que muchos conceptos y enseñanzas son sumamente poderosas; sin importar la religión o espiritualidad que sigas, en última instancia conducen a la misma verdad:
El amor es la fuerza más poderosa que podemos experimentar en esta vida y más allá.
Como se afirma en las enseñanzas religiosas: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. “Ama a tu prójimo”
A lo largo de mi camino espiritual, he abrazado esta idea con mayor profundidad. He aprendido que podemos enviar amor a cualquier lugar, personas e incluso al universo mismo.
Abrir nuestros corazones para dar y recibir amor es una práctica hermosa, que tiene el potencial de hacer del mundo un lugar mejor para todos.
Sé que esto puede ser muy difícil para algunas personas; a mí me pasó en el pasado. Pero incluso extenderlo a quienes te han hecho daño o con quienes has tenido problemas es un acto que puede ayudar a equilibrar y liberar cualquier energía negativa o karma entre vosotros.
El amor trasciende el tiempo, el espacio e incluso la familiaridad personal. No necesitamos conocer a alguien para enviarle amor. Simplemente podemos establecer la intención de abrir nuestros corazones, dar y recibir amor libremente, y reconocer la profunda conexión que todos compartimos.
Una meditación guiada para expandir tu corazón
Por eso creé esta meditación guiada de 10 minutos para recordarnos que el amor es infinito y siempre está disponible. En esta breve práctica, te concentrarás en abrir tu corazón, enviar y recibir amor, y experimentar una profunda conexión y paz.
🌍 Imagina lo que podría pasar si más personas adoptaran esta práctica. Un mundo donde el amor, la sanación y el apoyo fluyan sin esfuerzo entre nosotros, sin importar quiénes seamos ni de dónde vengamos.
Si esto resuena contigo, te invito a que te tomes unos minutos para probar esta meditación ❤️
Con amor y luz,
Estefanía
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